La Organización Internacional del Trabajo (OIT) define las cooperativas como “una asociación autónoma de personas que se han unido voluntariamente para hacer frente a sus necesidades y aspiraciones económicas, sociales y culturales comunes, por medio de una empresa de propiedad conjunta y democráticamente controlada”.
Una cooperativa puede tener distintos objetivos en relación con las necesidades y aspiraciones de sus asociados. Los socios de una cooperativa pueden asociarse en función de un objetivo de trabajo, de consumo, de comercialización conjunta, de enseñanza, de crédito, etc.
De acuerdo con la Alianza Cooperativa Internacional en su World Cooperative Monitor (2020), que hace seguimiento al movimiento cooperativo en todo el mundo, existen 3 millones de cooperativas en todo el mundo a las cuales está vinculada de alguna manera el 12% de la población.
Las cooperativas dan empleo u oportunidades de trabajo a 280 millones de personas en todo el mundo, equivalente al 10% de la población ocupada. Además generan ingresos de alrededor de $2,14 billones.
Se estima que la subsistencia de cerca de la mitad de la población del planeta está relacionada a empresas cooperativas.
Las cooperativas fomentan la práctica democrática y la inclusión social y han demostrado su resiliencia en medio de las crisis económicas y financieras. Son empresas que priorizan el progreso económico de sus socios, por lo que son un elemento clave para el desarrollo sostenible.
Las cooperativas, al no ser propiedad de accionistas, permite que los beneficios económicos y sociales que generan permanezcan en las comunidades mientras que las ganancias se reinvierten en la empresa o se reparten entre los miembros.
Tipos de Cooperativas
Las cooperativas varían según el servicio ofrecido y la forma en que se organizan sus miembros. También difieren según la actividad económica, cómo los miembros utilizan la cooperativa y el tipo de gestión.
Se pueden distinguir cuatro tipos de cooperativas:
• Cooperativa agrícola
• Cooperativa de producción y comercialización
• Cooperativa de ahorro y crédito
• Cooperativa de consumidores
• Cooperativa de trabajadores
• Cooperativa de vivienda
• Cooperativa mixta o de servicios múltiples
Ventajas de una cooperativa para los socios
Las cooperativas son organizaciones democráticas, centradas en entregar beneficios a sus miembros en lugar de maximizar el rendimiento a los accionistas que es el objetivo de una empresa comercial.
Ventajas fiscales: Muchos gobiernos garantizan beneficios fiscales en materia de impuestos a las cooperativas.
Oportunidades de financiamiento: Los gobiernos también tienen regularmente una serie de programas de subvenciones para ayudar a comenzar una cooperativa. Es una forma de promocionar este tipo de organización.
Reducción de costos y mejorar los productos y servicios: Actuando como cooperativa, en función de su tamaño, estas organizaciones pueden obtener más fácilmente descuentos en suministros para su actividad económica y en otros materiales y servicios.
Existencia perpetua: Los miembros de una cooperativa pueden unirse o dejar el negocio en el momento en que lo deseen, sin que con esto se deba disolver la organización. De manera que este tipo de estructura garantiza menos interrupciones y más continuidad en la actividad a la que se dedique con relación a una empresa comercial.
Estructura democrática: La democracia define estructuralmente a las cooperativas. La democracia asegura que está en función de las necesidades de sus miembros o socios. La inversión de cada socio en la cooperativa no afecta el peso de cada voto, por lo que ningún miembro debería dominar el proceso de toma de decisiones.
Cuando una persona se asocia a una cooperativa, el beneficio principal es que pasa a ser uno de los dueños de la empresa. Esta categoría de ser uno de los dueños, le da el derecho a participar en las decisiones de la empresa. De la misma forma, la persona recibe todos los beneficios que ofrezca la actividad de la cooperativa, bien sea de producción, de crédito, de vivienda, etc. En la mayoría de los casos, las cooperativas ofrecen a sus socios productos y servicios en mejores condiciones de los que éstos los conseguirán fuera de la organización.
Beneficios de las cooperativas
- Combatir la pobreza y seguridad alimentaria: A través de las cooperativas agrícolas, los pequeños productores comercializan sus productos juntos, teniendo más influencia y capacidad de negociar precios en el mercado global. La OIT estima que casi el 50% de la población agrícola rural se comercializa a través de cooperativas.
- Garantizar financiamiento accesible: Las cooperativas financieras o de crédito ofrecen financiamiento accesible a las personas excluidas del sistema financiero tradicional.
- Experiencia empresarial y ganancias se quedan en la localidad: Las cooperativas están dirigidas por la población local y está dirigida también a la población local. De manera que las ganancias permanecen en la localidad y generalmente se reinvierten en la cooperativa o se distribuyen entre los socios locales.
- Cooperación internacional: Existe una extensa colaboración entre el movimiento cooperativo internacional, compartiendo el aprendizaje y las mejores prácticas de hacer las cosas.
- Empleo: En todo el mundo las cooperativas emplean a 280 millones de personas, alrededor del 10% de la población ocupada mundial. Proporcionan trabajo con seguridad laboral y buenas condiciones laborales ya sea en el empleo agrícola como en el administrativo.
- Benefician a las mujeres: Las cooperativas fomentan la igualdad entre géneros. Las mujeres han establecido un gran número de cooperativas que le están proporcionando ingresos. Algunas cooperativas en el mundo requieren cuotas de género.
Importancia de las cooperativas en los países en desarrollo
Las organizaciones cooperativas que funcionan en todo el mundo son fundamentales en el camino a alcanzar el desarrollo sostenible, debido a que se focalizan en sus socios y en las necesidades de la comunidad en la que operan.
En los países en desarrollo, la superación de la pobreza es la gran meta. En este sentido, existe consenso entre organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Alianza Cooperativa Internacional, con relación a que la empresa cooperativa es el tipo de organización que mejor se adapta en el proceso de la búsqueda de la reducción de la pobreza y la exclusión.
Las organizaciones cooperativas impactan en la reducción de la pobreza en la medida en que brindan oportunidades económicas a sus socios, brindan seguridad a sus socios permitiéndoles transformar los riesgos individuales en riesgos colectivos, son un medio para que los socios accedan a recursos que les sirvan para ganarse la vida.
Otro aspecto importante que ha sido identificado en el camino a la superación de la pobreza es la igualdad de género. En este sentido, las cooperativas contribuyen a la igualdad no sólo por el aumento considerable de las mujeres que se asocian a estas organizaciones, sino que se crean más oportunidades para las mujeres.
En cuanto a la educación, elemento clave en la superación de la pobreza, las cooperativas permiten que se incremente el acceso a educación de calidad en la medida que proporcionan a los socios los medios para sufragar los gastos de escolarización y educación. Más allá de esto, se crean centros educativos propios de las cooperativas que se dedican a dispensar educación de calidad.
La seguridad alimentaria también es un factor en el que las cooperativas pueden ayudar. A través de estas organizaciones los agricultores, pescadores, ganaderos, silvicultores y otros productores logran resolver numerosos desafíos y garantizar que su producción llegue a los mejores precios y calidad a los consumidores.
Por último y no menos importante, las cooperativas logran reducir la brecha comercial entre el mundo en desarrollo y el desarrollado.